El paladio baja, el platino pierde precio y el oro y la plata suben
Materias primas
Escrito por MoneyController el 30.11.2023
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Durante 2024, los precios del oro y la plata siguieron una trayectoria ascendente, mientras que los del platino y el paladio, descendente: ¿a qué se debe?
Entre las materias primas, el oro ha experimentado una fluctuación de precios durante 2023, impulsada sin embargo por una tendencia alcista que ha llevado al metal amarillo a alcanzar un precio superior a los 2.000 dólares la onza en los últimos días. Detrás de la subida del oro, algunos analistas creen que existe la perspectiva de una flexibilización de las políticas monetarias por parte de los bancos centrales, en particular la Fed: la presión del dólar sobre el oro, ya que el billete verde es la moneda de referencia de la materia prima, podría por tanto ceder a lo largo de 2024.
La plata también ha subido desde principios de año: de 22,7 $ la onza, ha pasado a 24,9 $ estos días. Otros dos metales que, como la plata, también se utilizan con fines industriales, el platino y el paladio, han registrado, en cambio, una importante tendencia a la baja desde principios de año: el platino ha pasado de 1.000 dólares la onza a los 931 dólares actuales, mientras que el precio del paladio ha caído drásticamente, de 1.853 dólares a principios de año a los 1.014 dólares actuales.
En la revista "ExtraETF", Jörg Bernhard da una explicación de por qué los precios del platino y, sobre todo, del paladio han caído tan bruscamente: la razón es que estos metales sí tienen un uso industrial, pero se emplean principalmente para fabricar catalizadores para coches diésel y de gasolina. La tendencia hacia la movilidad eléctrica y una demanda limitada en comparación con la oferta, prosigue Bernhard, han llevado incluso el precio del paladio por debajo del umbral de los 1.000 dólares la onza.
Es precisamente en el paladio (en el que es posible invertir, por ejemplo, a través de ETCs) en el que se centra la segunda parte del análisis de 'ExtraETF': Bernhard señala que el precio de entrada es bajo y, aunque todavía no hay indicios de ello, esto podría dar lugar a ganancias si los precios repuntan. Sin embargo, quienes inviertan en paladio corren el riesgo de sufrir pérdidas muy elevadas (Bernhard habla de la importancia de establecer un mecanismo de stop-loss): de los cuatro metales mencionados hasta ahora, el paladio es el más volátil y una inversión de este tipo -concluye Bernhard- sólo debería considerarse como "adicional".
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